6 de agosto de 2012

Conectar.

¿Qué es conectar?

Conectar es sentirse identificado recíprocamente, fluidez en una conversación, saber qué está pensando la otra persona antes de que lo diga. Conectar es empatizar a lo bestia. Conectar es el prólogo de la complicidad. Conectar es no querer desconectar. Estás cómodo, estás a gusto, eres feliz, aunque no sepas muy bien qué es eso. Conectar es desear que no se vaya la luz nunca mientras estés enchufado a alguien.

Conectar es capricho del destino. El lazo eléctrico se materializa en un instante imprevisto. Unos conectan por polos opuestos, otros por hechos de la misma pasta, algunos de pura casualidad en su travesía por la red, los menos una tarde por Madrid.

Y, paradójicamente, en estos tiempos de continua conexión virtual, cada vez conectamos menos, cada vez hay más conexión no correspondida de esa de querer conocer a alguien y no poder por incompatibilidad irreversible. Y esto te frustra los amperios. Miras, oyes, escuchas y lees a tu alrededor y a la mayoría le apetece más desconectar que conectar porque estamos cansados de que nos electrocuten. Y es que cada vez nos sorprende más descubrir a alguien especial, a alguien que tenga el valor de quitarse la máscara para mostrarse tal y como es al mundo y que, al hacerlo, nos sea único, o mejor dicho, nos haga sentir menos solos e incomprendidos.

complices

Cualquier persona puede llegar a ser especial para alguien en cualquier momento. Esta noche quizá estemos conectando tú y yo.

6 de agosto de 2012

No hay comentarios:

Related Posts with Thumbnails