Empiezo a pensar que sí. Que revolcarme y regodearme en mi propia mierda tiene su parte buena. Sí, incluso diría que me gusta. Me hace (más) dueño de mi emociones y experto en insensibilidad... Perfecto para momentos como este...
(Risas)
Lo único que me preocupa es que este puto olor a mierda me acompaña todo el rato. A ver si con un baño de estupideces varias se me quita.
(Más risas)
Las cosas que hay que hacer a veces...
12 de noviembre de 2009
2 comentarios:
Y por qué no dejas toda esa mierda atrás? :O
soy una curiosa y me gusta tu blog, no el olor a mierda, es feo y no solo con un baño se va.
(:
Publicar un comentario