21 de enero de 2010

Señorita, ¿me concede este baile?

Te quiero un poco porno para esta noche. Que me dejes. Que me hagas. Que vengas a susurrarme: Échame un polvo, cariño. Y luego comernos con miradas y literalmente, como cuando me devuelves los mordiscos y me tiras de los morros con tus dientes y yo me quejo, y me pongo. Pegarte duro contra la pared y tocarnos, suave, apasionadamente. Agarrarte ese culo respingón que me encanta y recorrerte con mis manos frías esas dos cumbres irradiantes de calor. Que me digas que estás caliente, que tienes los labios húmedos y me jadees en los oídos mientras con los dedos me introduzco en los barrios bajos de tu cuerpo, donde no hay lugar para los chicos buenos. Hacerlo en esta ciudad de placer con las luces apagadas, donde quieras, cuando quieras, siempre. Tumbados, tú encima y yo debajo, al revés y en mil posturas diferentes para probarte al máximo. Para darnos el cien por cien. Para ponernos a cien.

Sonrío. Estás mojada y no veas lo cachondo que me pone esa cara sedienta de sexo. Te mueves bien al ritmo de este tabú, acompasando nuestras caderas, bailando en mí. Se te escapan gemidos y yo hace rato que no puedo reprimirlos. Y al rato, tanta líbido tendría que salir por algún lado...

Sí, ayer fuimos a bailar en sueños. Fueron fantasías de este baile. Luego sé que después del clímax caeremos rendidos en la cama de batalla. Pero esto no es una derrota. Orgasmo a orgasmo la guerra de nuestros deseos se decanta más a nuestro favor. Y te quiero como el primer día que probé de tu sed. ¿Quién me iba a decir que ese cuerpo y esa carita angelical guardaba tanta pasión? El aire que se respira en tu casa ya está cargado de tentaciones. Sabes lo que me gusta, así que busquemos lugares en los que fundirnos. Pero quiéreme, al fin y al cabo, esto es sólo un éxtasis al margen del amor, aunque lo complementa muy bien.

Es ahora que debo decirte que no podré quedarme contigo toda la noche, pero sabes que me encantaría compartir el epílogo de esta unión. Volveré a casa andando, y a la luz de cada farola, la gente podrá ver
que ya te estoy echando de menos.

*

Posdata: Ya sabes, te quiero un poco porno para esta noche. Vete quitándotelo todo o si no te lo arrancaré yo a bocaos, porque hoy
follas.


1 comentario:

marina alcolea lópez dijo...

tan sensual, tan romántico, tan directo..

me encanta.

Related Posts with Thumbnails